Día 58 #quedateencasa por decreto.

Lunes 11 de mayo de 2020.

“No importa que no me entendáis. Que yo estoy hablando en mi lengua española, que es tan bella y noble que debería ser conocida por toda la cristiandad.” REY CARLOS I DE ESPAÑA Y V DEL SACRO IMPERIO ROMANO GERMÁNICO

“La lengua no es la envoltura del pensamiento sino el pensamiento mismo.” MIGUEL DE UNAMUNO

“La perversión del léxico político no es un vicio, es un procedimiento.” FÉLIX OVEJERO

Empezamos a desescalar, y aquí es donde cometemos nuestro primer error, no en si las fases o las franjas son adecuadas, no si la pandilla de ineptos acierta o debería condenarnos a perpetuidad en arresto domiciliario, o si los guantes si o no deben ser obligatorios o solo sirven para limpiarnos el culo, o si mascarillas siempre, nunca, o de que clase, no, no, el error garrafal es el desescalado en sí, es la palabreja, que mira tú por donde no existe.

A nuestros políticos se les puede exigir muchas cosas, y muchas de ellas serán de carácter político y deberán estar asociadas a su ideario, pero el respeto al idioma es fundamental, un poquito de por favor, que no se exigen estudios mínimos, pero si los ciudadanos nos ponemos tontitos con si saben o no hablar ingles, que menos que exigir que sepan hablar español. El pasado 8 de abril en EUROPA PRESS ya había un artículo que decía que "la palabra 'desescalar' no está recogida en el diccionario de la lengua española. Según ha señalado la RAE, lo recomendable es evitar estos "calcos del inglés" y emplear 'aumentar' o 'intensificar' en lugar de 'escalar'. En el caso de 'desescalar', recomienda en su lugar el uso de 'reducir', 'disminuir' o 'rebajar'." O sea que tampoco se leen la prensa digital o escrita.

Por supuesto no es la primera vez ni será la última, ni tampoco es la mayor aberración, porque esa es que la desescalada nos lleve a la nueva normalidad.... Eso si que es una aberración, que un gobierno se permita el lujo de establecer que es lo normal y que no. Y es que volviendo a la RAE, su diccionario en sus dos primeras acepciones dice que normal es:

1. adj. Dicho de una cosa: Que se halla en su estado natural.

2. adj. Habitual u ordinario.

O sea, que lo que diga por decreto Pedro Sánchez y su mini yo con coleta es lo habitual, vamos que si dicen, cual devota madre, si te tiras por un puente .... , va a resultar que tirarse por un puente es lo normal. Estamos locos o que, y encima, ¿Es que no hay nadie mas para establecer que es lo normal que los que mas lejos de la propia normalidad están?.

Hablando de temas mas mundanos, hoy se me acabó la posibilidad de hacer fotografías al amanecer durante un "paseo" o "caminata" según se mire. No es que volver al trabajo presencial me disguste especialmente, pero ciertamente me ha hecho poca gracia, que le vamos a hacer.

La tarde ha sido provechosa, a parte de un pequeño descanso, nada que ver con la profundidad de sueño de ayer, he podido avanzar en un par de cursos que sigo, cortos, pero interesantes, y viendo que hacia mal tiempo y había poca gente, he salido a correr, no sin antes de haber dejado la masa del pan fermentando (ahora está en el horno).

Han caído algunas gotas lo cual viene bien porque es un frescor reconfortante, no como la lluvia de invierno que j*** que no veas, y de paso impide la salida masiva. Sin embargo como todas las veces que he salido a estas horas he acabado indignado con la inconsciencia colectiva. Ya me he quejado mucho, pero hoy en cambio he llegado a la constatación de una máxima, que ningún chaval menor de 18-19 años cumple con las normas de salida, absolutamente ninguno, cierto es que la inmensa mayoría se las pasa por el forro de los cojones y solo una gran  minoría hace amago de cumplir, pero lo de los críos, porque son como críos, es escandaloso. No se cuantas veces he oído la gran estupidez de que son la generación mejor preparada, pero doy fe de que es una absoluta mentira.

Botellones, grupos, reuniones, no se separan ni entre ellos ni al cruzarse con los demás, uno de cada 100 lleva mascarilla, es un p*** desastre, y los imbéciles de los padres haciéndose los tontos con los gilipollas de sus hijos. Hoy me he encontrado a los cuatro tontos del apocalipsis, en un camino apartado, e el campo, es decir que tienen cientos de hectáreas para pararse y se paran en medio del camino dejando las bicis tiradas impidiendo el paso. O sea, que me he tenido que parar y pedirles que se apartaran, que quitaran las bicis y solo amenazándoles con llamar a la policía se han movido un mínimo, ¿Y ese es nuestro futuro?, estamos muertos.

Lo mejor es que me he cruzado con el guardia civil del otro día, y me ha reconocido desde el coche. Me ha hecho ilusión que me saludara mira tú. En fin, voy a sacar el pan del horno y descansar bien, que.mañana será otro día.